El Mirlo
MEMORIA
Artículo 3 de 9
Destrucción; La Misiva de la Casa Desaparecida
La Casa Muerta
Foto RICO PAR: 23/10/08, 9.00 a.m. calle Praga, 23 - Barcelona.
En una pared escrito con spray negro reza el texto:
"Sois pedantes, siervos de vuestro amo, esclavos de la ignorancia y la sumisión".
Casa desaparecida, foto 23/10/2008.
La imagen "habla":

Lo "atractivo" y lo feo.
La imagen propia eludiendo el estado de flujo.
Disolución de lo envuelto y lo envolvente.
El flujo y lo psíquico, lo fijo y lo físico.
Desaparición de la memoria.
¿Despecho por alguna traición padecida?
Escrito transitorio canto a la libertad.
Ladrillo roto, concepto humano, y joven árbol.
La persistencia de la vida.
Las sobras imaginarias.

De una forma u otra, en el universo todo se encuentra diciendo algo. De hecho, la interrelacionalidad es una forma de diálogo, que no "debate". Las cosas y los seres, lo físico y lo biológico, no centran sus "quehaceres" en la imposición de "sí mismos", sino que hay una colaboración participativa entre todas las cosas y seres. Incluso "el comer o ser comido" es un diálogo que lo natural lleva a cabo en el que el que come "asimila" en sí mismo al "comido". Únicamente la psique humana, atrapada en el ego-céntrico, es la que considera imponiéndolo, que las cosas se han de mover y comportar como ella requiere. Para eso no tiene ningún reparo en "atenazar" la vida en beneficio propio, al margen de preguntarse si verdaderamente está comprendiendo algo de lo que el flujo creacional significa. Ella, la psique, tiene un atisbo de que hay un acceso a la inteligencia. Pero en realidad se justifica a sí misma quedándose atrapada en el instinto animal, entonces la inteligencia que le corresponde no acontece, viviendo así en el miedo y la ignorancia.
RICO PAR (Julio 29, 2009)
Caos Natural, Destrucción Inducida.
Lo "atractivo" y lo feo.
Lo atractivo es aquello que "atrae hacia sí", y todo lo que podemos decir "está formado", se configura por la "atracción" que mantiene unidas diversas relaciones. Lo atractivo también es aquello que nos "gusta" sin necesidad de encontrarle belleza. Lo atractivo siempre es la fuerza que une las cosas. Sin embargo, todo lo que no encontramos bello o atractivo lo calificamos de feo y no queremos ni verlo. La imagen de cabeza tiene todas las trazas de producir este sentimiento de "feo" en el espectador. Pareciera que hubiera sido suficiente con registrar el recuadro del texto, (aún lo difícil de su acceso frontal), pero ¿qué ocurre con el autor de la foto que persiste en utilizarla completa? En la medida que él ha ido estudiándola, dejándose llevar por lo que la imagen le explica, ha ido descubriendo algunas fascinantes analogías acerca de la vida misma, y eso ha terminado por producirle un nuevo sentimiento de ella que ya no puede asociar con lo feo, o incluso más, descubrir que a lo feo se le puede tener afecto, desde luego en el ámbito de lo físico, pues en el de lo psicológico lo feo más bien ha de disolverse. Pero claro, para poder verlo, lo feo psicológico, hemos de tenerle afecto, ya que si lo odiamos, lo rechazamos, entonces es imposible ver o comprender algo que estamos excluyendo.
La imagen propia eludiendo el estado de flujo.
Es la imagen propia en lo psicológico que fomentamos los humanos, de la que surge todo el disturbio que padecemos, ya que aún cuando nos esforzamos y nos devaneamos por conseguir que nuestro cultivo egolátrico sea "bello", que la propia imagen nos proporcione bienestar, seguridad, satisfacción, placer, dejamos pasar por alto dos importantes cuestiones, que van de por vida a impedirnos encontrar la paz en esa presunción errónea. En primer lugar eludir el hecho de que el auténtico estado de la psique es de flujo, y pretender condicionarla a una determinada imagen-sentimiento sólo va a producir erosión, fricción, pues es un acto de represión, que se manifestará como conflicto y dolor. Seguidamente forzarse a no ver que todo ese empeño del "yo mismo" es un continuo escuerzo en un movimiento de aislamiento, de separación, desde el cual se está proyectando en los deseos no encontrarse aislado, separado. Una abismal contradicción que no puede dejarse pasar en vano, sin embargo a la vez sufriendo por ser único y reconocido, al tiempo de procurar ¿amar?, pero sobre todo "ser amado", pretendemos eludirla y presumir encontrar la felicidad como si la contradicción no existiera. Creemos ilusamente que engañándonos a nosotros mismos podremos ser felices. Pretendemos escapar a la ley de lo envuelto y lo envolvente, y peor aún, quedar inconscientes de que lo envuelto y lo envolvente jamás dejan de estar unidos al mismo tiempo que en continuo movimiento.
Disolución de lo envuelto en lo envolvente
Todo lo formado ha conseguido estarlo envolviendo en sí mismo algo que ha producido utilizando lo envolvente. No puede formarse nada
Graphllage "Las Gemelas", (profecía subconsciente).1991. Visitar en Memorias mf.
sin esta relación de lo envuelto y lo envolvente. Así podemos aseverar que todo lo formado está constituido por lo envuelto y por lo envolvente, que se asimilan mutuamente. Un ejemplo claro de esto lo manifiesta una semilla, el rudimento físico mínimo necesario, que contiene el conocimiento envuelto en sí misma de cómo utilizar lo envolvente para convertirse por ejemplo en un árbol. El ser humano y el completo de la vida planetaria vivimos envueltos en la biosfera, otro ejemplo de los muchos que podríamos ir denotando. Esta relación entre lo envuelto y lo envolvente se encuentra en todo aquello que puede llamársele "algo que está formado" en cualquier momento de su completo ciclo de existencia, estado de "ser" para el cual siempre están en relación lo envuelto con lo envolvente. Esta relación entre lo envuelto-envolvente que subyace en todo lo formado jamás se rompe. Es así que cuando las cosas o los seres, que son todos ellos lo envuelto, mueren, se diluyen en lo envolvente, le retornan todo lo que de él utilizaron. Ninguna cosa formada, lo envuelto, se exime de este extraordinario hecho relacional, tornar a lo envolvente deshaciéndose en él. A eso lo denominamos su muerte. La psique en estado, en "formato", de ego-céntrico, el cúmulo psíquico, se ha formado por impactos retenidos provenientes de lo envolvente, y posteriormente en cierto grado de lo envuelto. En un bucle sin fin consistente en almacenar los subsecuentes impactos de lo envolvente de continuo traducidos por los ya almacenados anteriormente, y todo ello orbitando a un centro mayor de imagen propia, el ego-céntrico, el "yo", cuyo movimiento es de continuo acumulativo. Esta reafirmación del cúmulo psíquico es un estado de continua resistencia a la muerte, ya que sin comprender con claridad la muerte, "vivir en ella", en cuanto a lo psicológico, que es diluirse completamente en lo envuelto-envolvente, psicológicamente, no puede comprenderse el flujo que es la esencia de la vida, la cual implica la esencia de la muerte.
El flujo y lo psíquico, lo fijo y lo físico.
Es desde este juego-relación que la creación utiliza para formar las cosas y seres, que surge el cerebro humano con su completo organismo, una de las más complejas formaciones en el flujo creacional. Un ser, lo envuelto, que denominamos el "ser humano", y que a todas luces para poder existir precisa de su relación con lo envolvente a

Símbolo de
"Contaminación Biológica"


Símbolos en BLOG
"pixel-eduardo"
Visitar BLOG
diferentes niveles. Lo que es cada uno de nosotros. Al igual que el continuo campo de todo lo existente se forma a partir de la relación envuelto-envolvente. Mas ocurre que este cerebro en su interior envuelve, además de las funciones que contribuyen a mantener el funcionamiento interno y externo del completo organismo, otra función mucho más compleja, que consiste en "sentir" en forma de movimiento psíquico tanto las afecciones internas como las externas a él, sentir del que se manifiesta "una conciencia" del completo campo que abraza lo envuelto y lo envolvente. Desde luego completa cuando el sentir abriga lo total. Este sentir de lo envuelto en relación con lo envolvente ocurre en todas las cosas formadas, pero la conciencia de ese sentir en ellas es un campo que se despliega a través de distintas graduaciones de intensidad según lo que cada cosa o ser sea. El estado natural de la conciencia se encuentra en estado de flujo, a la par con el movimiento creacional, esto se ve obvio desde cualquier perspectiva, pues este flujo nunca se queda "quieto", es la vida misma que fluye de continuo, y la conciencia es precisamente darse cuenta de ello. Es en este estado de flujo que hace aparición otra importante función que "con y en" el cerebro humano se desarrolla: el intelecto. Éste trabaja con el pensamiento, con registros, con el tiempo, unidades de memoria celulares en las que su único trabajo, esfuerzo, consiste en mantener sus contenidos, lo que ellas envuelven, en estado fijo, esto le permite al completo organismo, cuerpo, cerebro-psique y conciencia, afectar tanto a lo envuelto como a lo envolvente a él, en el ámbito de lo físico. Y es aquí que aparece la trampa en la que el cerebro se queda emulsionado del espejismo, pues atrapando la psique en los registros fijos que utiliza el intelecto, proyecta la necesidad de que lo envolvente, en este caso lo social y lo ambiental, las relaciones, respondan a ella tal como lo que ella siente y cree que es en sí misma. Cosa que solo puede conseguir por la fuerza, por la coacción, o por el engaño a cualquier nivel en la relación. En todo caso es así como ahora la psique lo está haciendo. Extrae placer si lo envolvente se ajusta a sus sueños, y padece si sus sueños no se ajustan a lo envolvente.
Desaparición de la memoria.
La imagen de arriba muestra como se ha perdido información que ahí antes existía en forma de construcción física. Ahora sólo queda un difícil atisbo, o menos, y cuando se haya construido de nuevo, habrá desaparecido del todo. Quedará alguna referencia en los planos conservados, incluso así, con el tiempo, si éstos desaparecieran, o no hubiera ningún otro tipo de registro acerca de ella, quedaría borrada para siempre la noción de esa casa que ahí acaban de demoler. Hay registros muy longevos, recuperables
Símbolo de
"radioactividad" (en desuso)
.

Símbolos en Web
"vato04"
Visitar Web
dentro de tiempos muy grandes, pero los hay que desaparecen para siempre muy rápidamente. De hecho esto le pasa a todo registro, más tarde o más temprano terminará por diluirse. Esto le ocurre al cerebro cuando el organismo muere, en el que todas las conexiones neuronales, las sinapsis del cerebro "se sueltan", perdiendo toda la información que conjuntamente almacenaban, el ego-céntrico y su conocimiento de cualquier tipo. Todo lo que ocurra ahí en esa disolución tal vez deje un residuo derivado de si el ser estuvo produciendo energía o sólo consumiéndola, quizá, pero el cúmulo psíquico desaparece. Denotar aquí que decimos "el ser" que implica hablar de energía mental, y es aquí donde hemos de apreciar que también esta "energía mental residual" se retornará a lo envolvente. Es así porque lo mental y lo físico son un único campo, el flujo creacional. El cúmulo psíquico mientras se devanea por existir, generando un centro, proyectaba la idea de que continuaría después de la disolución, sin darse cuenta de que el espejismo de centricidad sólo ocurría ahí, en el interior de su cerebro, sin percibir que en el completo campo creacional de lo envuelto y lo envolvente no existe centro alguno, por lo cual ningún centro puede continuar, en mayor medida si ese centro no era más que una sombra. Las sombras sólo existen como resultado de las cosas que verdaderamente son, y tienen poca significación en lo psicológico. A excepción de comprender cómo surgen. Las sombras no están siempre, no son algo verdaderamente vivo, y dejan de existir cuando las cosas mueren. Es el centro, una ilusión, una proyección, que cree que existirá siempre. Sin embargo disolviéndose los registros no hay memoria, y siendo el campo de energía creacional total, uno y continuo, en él no existe la centricidad, ningún centro puede sobrevivir en ese campo. El ser persiste en afianzarse en el espejismo de centricidad, creyendo que eso es la verdad de la vida, con el sueño de llevarlo más allá de la muerte, sin embargo ese centro se pierde, la ilusión, si se ha mantenido hasta entonces, desaparece con la muerte del organismo físico. Esa proyección sólo podía "vivir", ser proyectada, mientras existiera soporte físico, el cerebro.
¿Despecho por alguna traición padecida?
"Sois pedantes, siervos de vuestro amo,
esclavos de la ignorancia y la sumisión"
¡Es tremenda esta "misiva"! El que la escribió ¿lo hizo antes o después de derribar la habitación? ¿Se refiere a determinadas personas que él conoce a raíz de algún conflicto entre ellos, o la dirige al ser humano en general? Parece obvio que cuando uno la lee lo primero que recibe es despecho, hasta un atisbo de reproche. Sin embargo está describiendo la situación psicológica del ser humano en su conjunto. Tal vez podamos excluir La Misivaa algunos esquimales o indígenas selváticos, si es que quedan viviendo, mas la cultura planetaria se centra en el cultivo del ego-céntrico, esto es obvio y evidente. Y el ego-céntrico como tal se encuentra imbuido en todo lo implícito y explícito que la frase reza:
"Sois pedantes". De una forma cacareada o con simulada humildad toda la vida del ser humano gira en torno al cúmulo psíquico, lo cual en sí mismo es un acto pedante: "yo soy", y alguien que es mucho más grande "me ha hecho", lo cual redunda en ser más pedante todavía, "engreído de sí mismo".
"siervos de vuestro amo" Tanto el dominador como el dominado se explotan mutuamente, y aunque se piensa que el dominador es más feliz que el dominado, en realidad ambos están tirando la cuerda hacia sí para ver quién puede más "ser el amo". Se condicionan mutuamente a la lucha y de ésta no puede surgir felicidad alguna, aunque sí mucho placer pero con su miedo oculto. Por lo cual ninguno de ambos son felices.
"esclavos" Este es el estado más arduo de percibir, no sentimos que nos encontremos en la esclavitud, cuando en la realidad, si lo miramos a fondo, somos esclavos del cúmulo psíquico que hemos heredado aceptándolo y que cultivamos como la única motivación al hecho de vivir. Aceptamos vivir en el pasado, que de hecho es "no vivir", es meramente transcurrir con la mente puesta en lo aparentemente fijo.
"ignorancia" Ésta es la esencia de todo problema que tenemos, ya que es la ignorancia la que nos domina, y soñamos que algún día fluiremos en la inteligencia, mientras tanto padecemos los efectos de la ignorancia. No tener noción de la proyección ilusoria que significa el acto de que el cerebro y la mente se anquilosen en una configuración psíquica determinada, vanagloriarse uno de ello, e imponerlo a los demás
Kaos y Destrukzión del mítico grupo de punk zaragozano Animales muertos en el 2oo4.
sugestionándolos o forzándolos al miedo, es un acto de ignorancia. Un acto de ignorancia es comprender exclusivamente con el intelecto desestimando el resto del sentir del organismo completo.
"sumisión". En los primeros despertares de cualquier ser humano, es una de las primeras cosas que se le enseña, la sumisión. Obedecer se premia y tener iniciativa propia generalmente se castiga o se reprende con el ánimo de corregirla, sobre todo cuando ésta desbarata lo establecido. La iniciativa propia sólo se acepta si produce dinero, de lo contrario es un estorbo, y aún así lo establecido siempre pone sus límites. De ahí que "amar" se haya convertido en un negocio, "si recibo te amo, si no recibo nada no puedo quererte". Tanto hemos perdido, o jamás dimos con ello, lo que es el amor, que ahora eso sólo lo circunscribimos a la relación mujer-hombre, al sexo, y el resto de relaciones nos cuesta más definirlas con esa palabra. Aceptamos la sumisión, ser sumisos, de muy diferentes maneras, pero siempre por una cuestión de miedo en la base. No nos damos cuenta de que donde hay obediencia, que implica mando, no puede existir jamás el amor, pues amor y libertad son lo mismo. No se requiere de mando y obediencia cuando hay amor e inteligencia, pues desde esas desconocidas cualidades fluye el completo orden en la cooperación de hacer las cosas juntos, de ahí la organización funcional donde no hay centro. Entonces la responsabilidad graduada se reparte en forma de árbol por cuestiones prácticas, y el "interés" es conjunto sin graduación ninguna en todas las partes involucradas, ya que hay unicidad completa. Pero es evidente que al cúmulo psíquico con su espejismo de centricidad inherente le cuesta mucho comprender esto que aquí se señala. (29/10/08 - 08:28:32 p.m.).
Escrito transitorio canto a la libertad
Es un hecho que vemos y sentimos la transitoriedad desde muy variadas perspectivas en la vida. Vemos con claridad que vida-muerte son dos aspectos de la misma cosa, el misterio creacional, y que no pueden separarse más que en las ideas. Esto lo vemos muy claramente, pero por herencia y negligencia, tradición y sugestión, nos resistimos a ello, nos creemos incapaces de vivir con esta verdad irrefutable, entonces inventamos las mil y una mitologías para consolarnos del dolor que nos produce el hecho de separar la vida de la muerte, que es lo que hace el cúmulo psíquico. Así veneramos a los muertos, que en realidad es adorar una imagen, el recuerdo que de ellos alimentamos. En esto sólo está involucrado nuestro interés propio. Y esto no lo hacemos para procurar un bien a los que se han diluido. Nosotros no podemos hacer ninguna cosa por los que han retornado a la nada. Esta adoración la hacemos para encontrar consuelo interno frente a la "vacuidad" que experimentamos con el hecho de la muerte a causa de no comprenderla. Por mero egoísmo no les
Queda Prohibido
Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarte un día sin saber qué hacer,
tener miedo a tus recuerdos…
Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo todo por miedo,
No convertir en realidad tus sueños…
Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen menos que la tuya,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha…
Queda prohibido no crear tu historia,
Pablo Neruda. Visitar Fuente.
dejamos partir en paz. Es obvio que un conglomerado psíquico articulado a base de recuerdos pasados y apuntando a vivencias muertas, en el que todo su esfuerzo es para sí mismo, deba sentir miedo al hecho de desaparecer, todavía más cuando este cúmulo psicológico lo único que hace es esforzarse por ser más grande y más fijo. Él lucha por que lo adoren en vida y también para que continúen adorándolo una vez muerto los que siguen en el flujo vivo, eludiendo no percibir la verdad que sentir de esta forma la creación proviene del espejismo de centricidad que el mismo cúmulo psíquico significa. Desde esta abismal ausencia de no encarar la verdad del movimiento vida-muerte, que es lo que como todas las cosas en la creación somos los seres humanos, hablamos de libertad cuando en realidad no la conocemos, pues estamos prisioneros del pasado que jamás puede retornar al flujo vivo. A esa cosa que así llamamos, libertad, le adherimos un significado, pero éste no tiene nada que ver con lo que realmente significa. Ahora para nosotros la libertad consiste en que los impulsos del yo-mismo puedan ser complacidos, realizados, siendo todo ello anhelos y deseos que provienen de lo que consideramos carencia, y esto lo hacemos sin darnos cuenta de que ser esclavo de los deseos niega de cualquier forma la libertad. Ahora somos esclavos del pensamiento y desde él intentamos comprender lo que significa libertad, hay una contradicción en ello, pues el pensamiento siempre es esclavo del registro, y la libertad implica flujo vivo. Es un hecho que toda nuestra organización social y en la vida cotidiana se encuentra basada en lo que el pensamiento proyecta, lo que revela inexistencia de eso que queremos denominar libertad. Los que organizan son esclavos de sí mismos y todo su empeño se centra en esclavizar a los organizados dentro del patrón "inventado". Los organizados se quejan, pero aceptan el juego, pues si pudieran se transformarían a ser organizadores. Unos y otros responden al espejismo de centricidad que sienten como verdadero. Y siendo éste una mera ilusión tomada como algo real es patente que no puede comprenderse lo que verdaderamente significa libertad, por lo cual ésta es otra de las cualidades que debemos aprender, descubrir y comprender, puesto que aún no sabemos lo que es ello. No se puede comprender la libertad desde el intelecto-pensamiento, pues la libertad es una cualidad en estado de flujo en unisonidad con el flujo creacional vivo. El ser ha de fluir en ello para comprenderlo y mientras se encuentra amarrado a los registros del cúmulo psíquico es imposible hacerlo.
Queda prohibido prohibir
(Pareciera ésta la paradoja de Bertrand Rusell, o el "cómo librarse de todos los cómos").
• Queda prohibido llorar sin aprender,únicamente lloramos cuando no aprendemos, o cuando la belleza desborda la "capacidad" del cerebro por asimilarla..
• levantarte un día sin saber qué hacer,¿no aprender lo que es estar sin hacer nada?
• tener miedo a tus recuerdos…no es el problema el miedo al pasado, sino averiguar la fuente del miedo, por qué nos identificamos con el pasado.
• Queda prohibido no sonreír a los problemas,sí, cuando son problemas. Las paradojas hay que observarlas muy seriamente.
• no luchar por lo que quieres,la lucha únicamente conduce al desperdicio del esfuerzo. Cuando la "vocación" en la acción es natural, auténtica vocación, la energía que mueve las cosas es su propia fuerza, y no existe esfuerzo alguno, fluye sin ser dirigido. No como en la lucha, que es un derroche de esfuerzo y para colmarlo más de desidia, dirigido.
• abandonarlo todo por miedo,¡Uf! Los seres humanos pareciera que hemos abandonado hace mucho el "crear" una nueva vida, más allá del miedo, la imposición y el proyectado futuro.
• No convertir en realidad tus sueños…¿mis sueños? ¿Proyecciones de futuro provenientes desde las carencias del pasado? ¿Puede haber liberación en el centrismo? Soñamos un mundo "mejor", no nos atrevemos a imaginarlo completamente bueno. Sin embargo, vivimos en el conflicto psíquico. En esa circunstancia y escenario, uno ha de realizar "sus particulares" sueños.
• Queda prohibido no intentar comprender a las personas,si sólo lo intentas, no lo harás. Se comprende a los otros, o no se les comprende, pero no se intenta, pues intentarlo es no hacerlo.
• pensar que sus vidas valen menos que la tuya,la vida es un continuo, no está separada, es el cúmulo psíquico quien se enclaustra dentro de sí mismo y se escinde de los otros. El ego-céntrico sólo piensa y siente en términos de "yo mismo" y " mí mismo", y esa es la exclusión que hace de los otros.
• no saber que cada uno tiene su camino y su dicha... – No, no, no. Lo siento. No existe "mi camino", y menos "mi dicha". El camino no existe, pues es el andar lo que ocurre, y por cierto que no es un flujo propiedad de una entidad ilusoria, como lo es el ego-céntrico. Todo se mueve, pero el centro no existe. Y la dicha, es una cualidad de la completa creación, que el cerebro puede sintonizar con ella, sólo cuando el "yo" y lo "mío" no existen. La dicha jamás puede poseerse. Aquello que se posee no es la dicha, pues al ser el poseedor un mero espejismo, ¿cómo puede una sombra poseer nada?

Búsqueda de imágenes
"Pablo Neruda"
Más hondamente, si somos capaces de verlo, no somos dueños de nada.
• Queda prohibido no crear tu historia,¿estar fijo a un pasado recordado, además de incompleto y relativo? ¿A una memoria, que a pesar de la resistencia, terminará por borrarse totalmente en la creación completa? ¡Qué iluso se torna el ego-céntrico! El "yo fui", "yo soy", "yo seré".
Hablándole a un muerto
Lo siento Pablo. No es mi intención descalificarte, bueno, aquello que todavía vibra de ti en el flujo vivo, pues tú, como entidad ser humano, ya no existes. Este texto tuyo, en el que me he metido de manera deliberada, al encontrarlo muy casualmente, explica muy bien, como ejemplo, la manera en que la poesía puede crear mundos internos, de sensaciones y sentimientos, que pareciendo muy reales, únicamente provienen de malos entendidos. La verdad es que no he leído nada tuyo a excepción de estas líneas, y cierta información acerca de quien fuiste en una enciclopedia, pero sin dudarlo tu nombre ha sonado mucho a través de los medios. Sin embargo, todo el asunto está en descubrir cómo liberar a la mente, sin prohibirle nada. Ya que se hace evidente que de la prohibición, de cualquier tipo, es imposible liberación alguna. Entiendo, que en tu verso "prohibir" es una forma de hablar, pero redunda tanto en la educación "impositiva" que deberíamos abolir esta palabra, ya que únicamente sirve para ser utilizada en el "código de circulación" automovilístico. La mente auténticamente libre no se mueve por aceptación o prohibición, su movimiento básico es comprender los hechos, y éstos ni se aceptan ni se prohiben.
La comprensión verdadera y profunda de las cosas no requiere ni prohibición ni aceptación de ellas, pues el comprender despliega su propia acción en interrelación directa con lo comprendido, de ahí, el ser y la mente fluyen al unísono. Sólo cuando no comprendemos, es que "soñamos" realizar nuestros "sueños", incluso, sin darnos cuenta de que es ese ilusorio movimiento de carencias y anhelos el que está en juego.
Pablo Neruda. Poeta y diplomático chileno.
Ricardo Eliecer Naftalí Reyes Basoalto, su nombre original.
Nace en Parral, y muere en Santiago. (1904-1973).
RICO PAR (Octubre 6, 2009)
Ladrillo roto, concepto humano y joven árbol
Despilfarramos energía por el mero placer de desperdiciarla. Jamás pensamos que con esa energía desaprovechada el espectro social más bajo podría cubrir las necesidades básicas que ahora careciendo de ellas les atenazan psicológica y físicamente. Esto nos conformamos en verlo como una noticia de telediario, o como un dato más en una estadística, y tal vez se despierte un cierto sentimiento de condolencia, pero el siguiente paso es: "cada uno se ha de espabilar por cuenta propia". Desde ahí continuamos desperdiciando energía necesaria para otros. A este estado de cosas lo llamamos "progreso". Así, progresar significa "ciertas mermas de desperdicio de energía", perdida sin haberla consumido o habiéndola consumido de forma pueril y con muy poco o sin significado alguno. Quién más puede hacer esto mayor es su grandeza. Esta declaración no es cínica, es un hecho. Por un lado nos imantamos a la falacia de la propiedad, el ser "dueño" de un trocito de universo construido más o menos grande nos proporciona seguridad, aunque con su paralelo miedo que desde luego no queremos verlo. Por otro lado tampoco queremos ver que la seguridad es algo inventado, proyectado por la idiosincrasia de la psique que ahora se siente insegura, de ahí surge sentir "pasármelo lo mejor posible mientras yo deba estar aquí vivo". Nos afianzamos en el "concepto", en la ideología, y la verdad no nos interesa verla pues destartala nuestras convicciones de las que extrapolamos proyectada seguridad interna, y supuesta felicidad de la vida. Sólo admitimos que sufrimos cuando la evidencia ya no puede ocultarse de ninguna manera. Jamás descubrimos la auténtica inteligencia natural que nos corresponde como seres humanos. Engañados como estamos de que podemos domesticar lo natural hasta niveles insospechados, desestimamos su esencia, y sólo nos valemos de ella, de la naturaleza, para explotarla a nuestro beneficio desdeñando el suyo propio. Para más regodeo esto lo hacemos dejando de darnos cuenta que nosotros mismos somos flujo natural. Nunca nos preguntamos por qué nos disociamos de él, de la misma forma que no nos preguntamos por qué es que hacemos las cosas tan mal, a pesar del extraordinario despliegue de conocimiento que ponemos para organizar el planeta completo. Aun cuando los organizadores presumen de que lo están haciendo de la mejor forma posible para todos. Y no dudamos de que cierto orden podemos mantener, ,pero siempre con la terrible sensación de que andamos sobre la cuerda floja, lo que de nuevo revela que aceptamos vivir de forma insegura y temerosa. Eso que llamamos jerarquía psíquica no existe en el universo. Por ejemplo, sin cerebro no hay cuerpo, pero sin corazón no hay cerebro, todo el organismo es algo unísono, donde no Bomba Atómicaexiste lo más grande o lo más pequeño jerárquicamente hablando. La jerarquía psíquica surge del espejismo de centricidad que proyecta escalafones desde donde el ego-céntrico cree que se encuentra. Otro ejemplo; el que se tiene a sí mismo por una persona que "sabe mucho" mira a los demás desde arriba, y el que se siente carente de conocimiento lo hace desde abajo. "Yo sé como se hacen las cosas y tú debes amoldarte a ello porque no sabes nada", proviene de esta fatamorgana psíquica. La jerarquía psíquica, que es la única forma de jerarquía que existe, precisa de la opresión y el miedo para poder manifestarse. Cualquiera admitirá que nuestra vida, tanto la planetaria como la cotidiana, nuestro sentir se encuentra prisionero de esa regla social en la que jugamos a ser el adorado y el adorador, mientras hablamos de fraternidad y libertad, palabras adobadas con los "derechos humanos", que a duras penas se cumplen, y que en realidad son el ilusorio caramelo para aceptar las obligaciones, las "prohibiciones", las cuales se imponen a raja tabla y sí hay constancia de ellas. Sin ir a las causas primeras que están generando el desordenado caudal de nuestras relaciones humanas, jamás podremos despertar a un nuevo orden no imaginado, y esto, todo ser humano más allá del circunstancial escalafón social en el que se encuentre, si verdaderamente es serio para él todo este asunto de la psique humana, pondrá su corazón y su mente en desvelar en sí mismo y en los otros esta encrucijada madeja psíquica que nos tiene presos. (09/11/08).
La persistencia de la vida, de lo creacional.
La centricidad que proyecta la acumulación psíquica tiene eclipsado el cerebro humano, nuestro cerebro. Esto proviene desde muy antiguo, y se han cometido y se comenten barbaridades tremendas y absurdas locuras resultantes de ella, del ego-céntrico. Pareciera natural que ocurriera como ocurrió al principio, pues lo niño, lo joven, se mueve en el momento confuso de estar despertando, consciente y subconsciente se manifiestan al Persistencia de la vidamismo tiempo, y esto produce mucha extrañeza en las percepciones, que al pretender entenderlas o explicarlas desde esa situación de confusa ignorancia lleva a la mitología, la que se convierte en superstición cuando se toma en serio. Pero ambos consciente-subconsciente pueden ser observados, pues en realidad son lo polar de una sola cosa, el cerebro y sus contenidos, lo que implica que puede madurarse. La maduración es posible. Aunque por el momento lo que se manifiesta es que en lo psicológico la humanidad no maduramos. Ocurre que en esa niñez y adolescencia se pueden imaginar muchas cosas irreales, que al madurar hay que ir comprendiendo las que son falsas para que la verdad surja por sí misma. Apartando lo falso surge lo que es verdadero. Los albores de la humanidad están llenos de mitos, que persisten hoy en día conviviendo con los grandes y veraces descubrimientos científicos sin que la racionalidad de éstos pueda menguar la irracionalidad de aquellos. Pero a medida que se avanza, si la mente sigue el camino de la coherencia, la lógica y la verdad sin ápice de interés propio, sin centro, los fantasmales miedos, supersticiones, mitologías y creencias van quedando de lado como cuentos infantiles, que pueden tener su atractivo y significado en ese campo de alegoría simbólica, pero que se convierten en letales armas en la mente de un ser inmaduro que las mantiene como verdades. Ahora se ha madurado "físicamente", y hasta cierto punto, pero mentalmente no se ha salido de las sobras, permanecemos en ellas. Esto nos está ocurriendo a nosotros los seres humanos, nos negamos a despertar regodeándonos en querer seguir durmiendo. ¿Algún día deberá ocurrir el cambio?

Búsqueda de imágenes
"sombras imaginarias"
Un día que podamos decir, «"hemos madurado", nuestra mente está unida porque ya no nos separan las ideas. A pesar de que cada uno somos diferentes, se ha abierto la mente común que compartimos y ya tenemos noción de que cada ser humano desde la profundidad somos el mismo. En nuestra mente bulle la unicidad de la vida, del cosmos, de la creación completa, y desde ahí nos relacionamos, pues hemos desvanecido el espejismo de centricidad. Desde ahí nuestras diferencias superficiales, físicas, de carácter e inclinaciones vocacionales, lo que hacen es contribuir al compartirlas al "enriquecimiento" del otro, a la creatividad conjunta». ¿Podremos decir esto? Esta captación no puede alcanzarse desde la centricidad operando, esto es evidente por sí mismo. Lo cantamos en nuestras canciones de futuro, suena de continuo en el completo planeta, queremos un mundo inteligente y libre en el que todo ser humano nos estemos realizando en el flujo vivo con la verdad y el gozo creacional, pero no lo hacemos. El espejismo de centricidad está muy arraigado, prácticamente en todo el ser humano, y resulta que nos es más cómodo seguir sufriendo por lo propio que ser felices en conjunto. Lo otro, el contacto directo de uno mismo con la profundidad de la creación, con la persistencia de la vida que es el flujo del ahora, con lo creacional, que a todas luces proviene de lo Desconocido, preferimos reducirlo a un sueño mental arrastrando imágenes prefabricadas y emociones repetitivas, a sentirlo de forma completa en la mente y en el organismo ahora que está "bullendo", siempre de forma nueva.
Las sobras imaginarias
La tendencia que tenemos a ver caras, rostros, a partir de formas o masas de color disformes y abstractas es muy corriente. Hacer esto le es muy fácil a muchas personas. El principio por el que el cerebro proyecta desde esas formaciones sin sentido aparente, rostros humanos o formas de animales es el mismo que opera proyectándose el sentimiento de centricidad, de ego-céntrico. En el caso de la mera imagen visual, a partir de conocer cómo es un rostro o un animal por haberlo visto antes, nos permite reunir al mismo Sombras en las tierratiempo que eludir distintas masas y texturas en lo que vemos contribuyendo a construir en el cerebro su proyección. Inicialmente es un trabajo de lectura que realiza el intelecto y la imaginación lo convierte en una imagen interna con sentido aparente, pero que como es obvio no existe en la realidad . En el segundo caso, la proyección del ego-céntrico, ocurre lo mismo pero en éste contribuyen todos los sentidos, no sólo el visual como en el anterior. La "masa" de recuerdos psicofisiológicos, que almacenan dolor y pena, alegría y triunfo, el escalafón relacional, etc. etc. proyectan una imagen-sensación muy potentes de algo que parece ser muy real, pues a eso se le suma la propiocepción, que contribuye a reforzar eso que denominamos "yo", sin embargo es una mera proyección. Siendo la propiocepción una función natural del organismo, el ego-céntrico es una retención proveniente del miedo producido por la imposición, nada natural. Al igual que los rostros y los animales inventados a partir de unas manchas o texturas sin sentido. Pero se adiestra tan en demasía a tomar este resultado ilusorio como la verdad de la vida, que se hace muy difícil que la mente pueda atisbar que ella no es Sombras explicadas la formación del ego-céntrico que en el interior del cerebro se proyecta desde los registros almacenados. Es en este punto que tomando como real esa proyección, la acción del ser humano resulta en problemas y contraposición, lo proyectado jamás puede ser ordenado pues lo ilusorio, la contradicción, en sí mismo es desorden. El ego-céntrico es un movimiento que contrayéndose hacia sí mismo al mismo tiempo se esfuerza por expandirse hacia el exterior. Dos movimientos absolutamente contradictorios de los que es así que la psique sufre por diferentes aspectos involucrados en esa pérdida de energía oponiéndose y por esto mal utilizada. Si uno quiere levantar un peso, no puede hacerlo si al mismo tiempo está impidiendo que pueda ser levantado. El estado inicial es de concentración en uno mismo, pero preciso extenderme en los demás, de aquí surgen la dependencia y la debilidad, pero también la hipocresía y la falsedad. El estado en el que la mente comprende, de lo que emana paz y libertad, ocurre cuando se percibe con claridad el espejismo de centricidad, cuando se ven claramente todas las tretas y engaños que el cúmulo psíquico, el ego-céntrico, le juega al "ser" en su única y perpetua búsqueda de continuidad. El estado de comprensión que se precisa para "ver-sentir" este mecanismo indeseado, y todo lo que él implica y manifiesta, únicamente puede ocurrir si verdaderamente "uno" está dispuesto a descubrir sin ápice de interés propio, ya que éste es todavía el resultado del egoísmo del ego-céntrico. (11/4/2009).
RICO PAR (Fechas dentro texto. Revisión html Julio 29, 2009)
 
Búsqueda de imágenes
greenpeace
Resultados 2.720.000
Visitar Búsqueda
Búsqueda de imágenes
Destrucción Caos
Resultados 169.000
Visitar Búsqueda
Búsqueda de imágenes
memoria universo

Resultados 233.000Visitar Búsqueda
 
   
Metafísica,
¿de la mente?
Destrucción; La Misiva
de la Casa Muerta.
El Ahora.
Lo Eterno. Parte I.
MEMORIA
Artículo 3 de 9
Espacio Descubrimiento y Dilucidación
Esponsoriza y Aloja:
Espejismo de Centricidad - RICO PAR - 2008/09
http://www.tmirlo.com